Al igual que las mujeres Chin, la tribu Apatani (India) tomó una decisión similar con las mujeres de la aldea. La tribu de los Nishi (principalmente pero no la única) atacaba constantemente a esta tribu y como botín de guerra se quedaba con las mujeres para violarlas así que decidieron “afearlas”. Sus narices son diariamente masajeadas hasta que tienen la 1º menstruación que será cuando les perforarán la nariz poniéndoles dilatadores y tapones hechos con bambú llamados Hurlo Yaping.
También practicaban los tatuajes faciales que serían unas líneas rectas desde la frente hasta la barbilla acabando en varias líneas. En 1970 fue prohibida esta práctica y hoy la última mujer que se taponó la nariz ronda los 30 años. Afortunadamente es una tradición que se puede considerar muerta y es un pueblo conocido por desarrollar un sistema de cultivo del arroz único que, sin ayuda de maquinaria ni productos químicos, se ha demostrado mucho más productivo que el de los países más avanzados. Los humedales, provistos de agua gracias a numerosos canales, sirven para la agricultura y para la pesca y suponen tal grado de preservación ecológica que la UNESCO se ha interesado por esta zona con la intención de incluirla en su listado de Patrimonio de la Humanidad. Así que los que se creen que dilatarse la nariz es algo moderno que sepáis que estáis reproduciendo una práctica humillante y misógina que se optó por miedo y desesperación.
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